Protegernos de los rayos solares, cada vez más importante

El sol es indispensable para la vida, pero su radiación puede ser nociva para el organismo, sobre todo para la piel. Poseemos mecanismos de defensa naturales, como el bronceado, pero a menudo son insuficientes y debemos recurrir a protecciones artificiales como el fotoprotector.

El sol y la piel

El sol emite radiaciones ultravioleta de los tipos A, B y C (UVA, UVB y UVC), aunque la mayor parte de la radiación que llega a la tierra es del tipo UVA y en menor cantidad UVB.

El bronceado es una reacción natural de la piel como defensa a las radiaciones, debido a una mayor producción de melanina. Otros mecanismos de adaptación y defensa son la activación de moléculas antioxidantes, sistemas de reparación de ADN y espesamiento de la capa córnea.

Hoy en día estos mecanismos son insuficientes para prevenir los efectos perjudiciales que la exposición solar excesiva puede causar en la piel y en la salud, como quemaduras, envejecimiento cutáneo, cáncer de piel, fotosensibilización y alergias. Por esto recurrimos a protecciones artificiales: ropa, sombrillas, gafas y fotoprotectores solares.

1. ¿QUÉ ES UN FOTOPROTECTOR? FACTORES DE PROTECCIÓN SOLAR Y LOS DIFERENTES FILTROS

Un fotoprotector es un producto que, aplicado sobre la piel, filtra la radiación que recibe, a la vez que hidrata y nutre, para así protegernos de los efectos perjudiciales de las radiaciones ultravioleta.
La capacidad de un fotoprotector de filtrar las radiaciones UV se mide por el factor de protección (FPS), que siempre debe estar indicado en el envase.
En la composición de un fotoprotector pueden haber filtros químicos, físicos y biológicos.

Los filtros físicos actúan sin dejar que las radiaciones ultravioleta los atraviesen. La piel no los absorve y reflejan la radiación solar impidiendo que penetre en la piel.

Los filtros químicos absorben las radiaciones y las transforman en no perjudiciales.

Por último, los biológicos son antioxidantes, que actúan evitando la formación de radicales libres, aumentando así las defensas de la piel. Los filtros biológicos más empleados son las vitaminas A, E, C y B, zinc, magnesio y flavonoides.


Un producto se considera "water resistant" si después de dos baños de 20 minutos, queda al menos un 70% del valor del factor de protección calculado sobre piel seca y "water proof", si resiste cuatro baños de 20 minutos.

2. ¿QUÉ ES EL FOTOTIPO?

El fototipo de piel viene dado por las características físicas de la persona, que son las que determinarán su capacidad de broncearse.
Cuanto más bajo es el fototipo (tipo 1), mayor tiene que ser el factor de protección solar (FPS) utilizado.

FOTOTIPOTIPO DE PIELREACCIÓN SOLAR
Fototipo 1Piel muy clara.
Ojos azules.
Lunares.
Casi albinos.
Inflamación intensa de la piel, caracterizada por manchas rojas (eritema).
Gran descamación.
No se broncea.
Fototipo 2Piel clara.
Ojos azules o claros.
Cabello rubio o pleirrojo
Reacción eritematosa.
Descamación.
Bronceado ligero.
Fototipo 3Piel blanca.
Cabello y ojos oscuros.
Eritema moderado.
Bronceado suave.
Fototipo 4Piel mediterránea
Cabello y ojos oscuros.
Ligero eritema.
Bronceado fácil.
Fototipo 5Piel morena, tipo india, suramericana o
raza gitana.
Eritema imperceptible.
Brondeado fácil e intenso.
Fototipo 6 Piel negra.No hay eritema, pero sí
bronceado.

3. ¿QUÉ ES EL ÍNDICE DE RADIACIÓN ULTRAVIOLETA (UVI)?

Para proporcionar una información sencilla y directa sobre los niveles de radiación UV, se ha establecido el índice UV, como un vehículo para advertir al público de los efectos potencialmente nocivos que sobre la salud tiene la exposición a la radiación solar. 
Sus valores van del 0 al 16 (0 indica el riesgo mínimo de exposición y 10 ó más, el máximo).

4. ESCOGE BIEN TU FOTOPROTECTOR

El índice UVI y el FPS se relacionan en función de la sensibilidad de cada persona (fototipo).
He aquí una tabla que nos orienta sobre qué factor de protección es el más adecuado según el fototipo y el UVI.

UVIFototipo IFototipo IIFototipo IIIFototipo IV
1-315-2015-2015-2015-20
4-630-5030-5015-2015-20
7-95030-5015-2515-20
>10606030-5015-20

5. ANTES DE LA EXPOSICIÓN SOLAR

Conviene seguir unas pautas de actuación para prevenir los efectos perjudiciales que el sol puede causar en la piel y en la salud.

  • La piel debe estar correctamente hidratada y limpia (sin maquillaje).
  • Evitar el uso de productos que contengan alcohol y perfumes (colonias o desodorantes), que pueden dar lugar a manchas oscuras en la piel.
  • Elegir el fotoprotector más adecuado según el fototipo cutáneo; teniendo en cuenta las condiciones ambientales, tipo de piel y lugar de aplicación.
  • Aplicar el producto 30 min. antes de la exposición solar, sobre la piel seca y en cantidad generosa.
  • Actualmente está muy extendido el uso de cremas hidratantes con factor de protección durante todo el año.

6. DURANTE LA EXPOSICIÓN SOLAR

Se aconseja:

  • Evitar tomar el sol o aumentar la protección entre las 12 del mediodía y las 4 de la tarde.
  • Recordar que el agua, la nieve y la arena reflejan los rayos solares, aumentando los efectos sobre la piel. ¡Pueden producirse quemaduras incluso a la sombra!
  • Emplear una protección más alta en las primeras exposiciones solares, e ir aumentando progresivamente el tiempo de exposición. Aunque la piel esté bronceada hay que seguir protegiéndose.
  • Se deben extremar las precauciones en las partes del cuerpo más sensibles al sol: cara, cuello, calva, escote, orejas y empeines. Los ojos se protegerán con gafas de sol adecuadas, los labios con lápices o barras protectoras y el cabello con sombreros o productos específicos.
  • Utilizar el fotoprotector incluso en los días nublados.
  • Ingerir abundante líquido, para compensar la pérdida que se produce en la exposición solar.
  • Aplicar el fotoprotector cada 2 horas, y siempre después del baño o excesiva sudación.
  • El espesor de la película aplicada en la piel influye en la eficacia del fotoprotector. Se debe aplicar en cantidad generosa sobre todas las partes del cuerpo expuestas al sol.

7. DESPUÉS DE LA EXPOSICIÓN SOLAR:

  • Hidratar la piel después de una ducha de agua tibia, para recuperar la pérdida de agua y prolongar el bronceado.
  • Para evitar el envejecimiento de la piel, deberán cuidarse especialmente la cara, las manos y el contorno de los ojos con productos específicos.

8. RECUERDA:

  • Incluso en tiempo nublado, en ausencia de sol directo, somos alcanzados por una cantidad importante de radiación UVA.
  • Igualmente hay que tener en cuenta que los UVA no son retenidos por el cristal, y por tanto se pueden acumular dosis importantes si permanecemos largos períodos detrás de la ventana.
  • Los UVA presentan también mayor capacidad de penetrar en el agua.
  • En el caso de estar tomando medicamentos, conviene consultar con el farmacéutico para evitar fotosensibilizaciones.
  • Existen enfermedades en las que el sol está contraindicado. Debe consultar al médico o farmacéutico.
  • Hay que reducir las exposiciones solares y hacer uso de protecciones físicas: ropa, gafas, sombrillas y protectores solares.
  • Las radiaciones ultravioleta de las lámparas de bronceado pueden afectar a los ojos y a la piel.
  • Los cambios de color, forma o tamaño de las pecas, lunares deben consultarse con el especialista.

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Reportaje publicado por Farmàcia Serra

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