Síntomas
¿Cómo detectar si tu hijo tiene piojos? Pues un primer síntoma de infestación es el picor intenso en el cuero cabelludo, principalmente detrás de las orejas, la nuca y en la coronilla. Así que si lo ves rascarse con fuerza, desconfía.
La persona con piojos se rasca la cabeza y las orejas, provocándose incluso irritaciones y lesiones. La presencia de liendres y especialmente de individuos adultos es el síntoma definitivo.
Prevención
Para evitar el contagio nada mejor que una buena prevención. Para ello, conviene extremar las medidas de higiene y no usar peines o ropas de compañeros de clase cuando haya riesgo de contagio. Otra medida es cortarle el pelo dado que así resulta más fácil la inspección del cuero cabelludo.
Los padres de los niños no afectados, pero en situación de riesgo, deben vigilar diariamente las cabezas de sus hijos y proceder a un tratamiento preventivo no agresivo, con repelentes, y no con lociones antipiojos con principios activos farmacológicos, a no ser que se valore un riesgo especial para la salud.
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La costumbre de emplear de forma preventiva, sobre todo en colonias, tratamientos anti-piojos, están favoreciendo la proliferación de superpiojos muy difíciles de erradicar. Los champús, con principios activos pediculicidas, no son aconsejables. Se debe utilizar siempre productos sin sulfatos, adaptados a la sensibilidad del cuero cabelludo infantil.
Tras haber tenido piojos, es conveniente lavar la ropa y sábanas con agua muy caliente para eliminar así cualquier parásito. Hay que tener en cuenta que los piojos pueden permanecer vivos 24 horas fuera del cuero cabelludo así que se recomienda pasar la aspiradora o vaporizar un insecticida por los muebles y por el suelo de la zona donde se haya producido una infestación. Un consejo a tener en cuenta es la de cambiar la funda de las almohadas diariamente mientras dure la infestación.
Por cierto, no te olvides de los asientos del coche. Un truco puede ser dejar el coche al sol con las ventanas cerradas, así morirán. Otra acción a desarrollar es la de limpiar los cepillos, peines y pasadores dejándolos en una solución de agua y vinagre unas cuantas horas.
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Tratamiento
Lo más efectivo para eliminar los piojos y las liendres es:
1º Pasar la liendrera meticulosamente.
2º Realizar el tratamiento.
Los tratamientos pueden ser con productos de base química o con productos naturales.
- Tratamiento con productos de base química
Los antiparasitarios más usados son los piretroides sintéticos debido a que no son tóxicos para el hombre. La permetrina se emplea mucho, al 1%, pero ya hay resistencia a la permetrina tanto en Europa, donde también se han hecho estudios, como en Estados Unidos. Se deja actuar 15 minutos y luego se aclara y hay que tener en cuenta que no actúa sobre los huevos. En casos severos se han usado concentraciones superiores. Tiene un efecto residual positivo a corto plazo, pero que produce resistencias a largo.
Otros productos son, el Malation, eficaz sobre piojos y liendres. No debe emplearse en menores de 6 años, actúa más rápidamente pero con mayor toxicidad.
El Lindane, antes muy empleado es más tóxico y por lo tanto está contraindicado en niños. Se aplican sobre el cuero cabelludo seco pues actúa mejor. Hay que repetir el tratamiento a los 7-10 días, para eliminar del todo la infestación. La forma de aplicación más eficaz disponible según orden de efectividad es la espuma, la loción y el champú. Proteger los ojos y mucosas durante la aplicación.
Un producto que también puede ser empleado es el peine eléctrico que detecta los piojos y los mata con una pequeña descarga. Se tiene que usar con el pelo seco y no siempre es fácil localizar al bichito.
Si quieres asegurarte de que la cabeza de tu hijo está libre de piojos puedes optar por un champú post-tratamiento para evitar que vuelvan a aparecer.
- Tratamiento con productos naturales
- Con acción preventiva
Son muy útiles para prevenir la infestación en personas expuestas. Algunos productos del mercado emplean la Aromaterapia. Los aceites esenciales son útiles como repelentes y ayudan a erradicar la infestación. Se basan en mezclas de aceites de Tea Tree (Arbol del té), Orégano, Eucalipto con algún aceite vegetal, como el de Neem.
Lo mejor es adquirir un producto especializado ya que existen varios en el mercado, tanto en forma de loción como de champú y contienen estos aceites esenciales.
Pero también lo puedes preparar tú misma. Solo tienes que añadir el aceite esencial de Tea Tree, Árbol del Té, al champú habitual. La cantidad a añadir de aceite esencial es del 1% al contenido total del envase del champú. Utilizando esta combinación en cada lavado se protege al menor de la aparición de piojos.
- Para eliminar los piojos
Existen diferentes posibilidades de tratamiento con productos naturales para erradicar los piojos una vez ya han infestado el cuero cabelludo. Incluso podrás encontrar métodos infalibles basados en aromaterapia y aceites esenciales.
El aceite de coco y otros aceites vegetales es una de ellas. Se aplica empapando el cuero cabelludo y dejándolo durante toda la noche. Hay que repetir la aplicación al cabo de 8 días. El piojo morirá así asfixiado.
Otra posible solución es mezclar vinagre y agua ya que ayuda a desinfectar los utensilios y a eliminar los huevos o liendres. Se puede aplicar directamente sobre el cabello seco, con cuidado para que no vaya a los ojos y dejarlo así por unas horas. Un método infalible y natural.
En los últimos tiempos se ha popularizado la dimeticona, un spray que no usa insecticidas y que presenta una gran eficacia. Al contrario que con las locciones o champús, esta silicona crea una película alrededor del piojo y lo deja encapsulado por lo que el animal acaba muriendo. Un sistema respetuoso con el cuero cabelludo del niño y eficaz contra los piojos.
Tipos de piojos
El nombre científico de la infestación de estos molestos “bichitos” llamados piojos y sus consecuencias dermatológicas es pediculosis. Sin embargo, hay otros tipos de piojos, (ver anexo 1) aunque los piojos del cuero cabelludo son unos insectos cuyas patas presentan unas pinzas que les permiten agarrarse a los cabellos, donde habitan y donde se nutren. Su boca está adaptada a funciones perforadoras, ya que el insecto se alimenta de la sangre del individuo.
Hábitat y propagación de los piojos
Los piojos no saltan como las pulgas, ni pueden volar, pero se desplazan rápidamente y pasan de una cabeza a otra directamente al compartir objetos personales o en contacto con la cabeza infestada. La forma de propagación es a través del contacto físico con otra persona infestada. Una razón de la propagación entre niños es el gran contacto físico y las horas de permanencia juntos en clase, el parque o cualquier otro espacio público.
También se propagan por medio de la ropa, sombreros, cascos de música, peluches, juguetes o con el uso de peines de otras personas. Podemos afirmar que los piojos del cuero cabelludo, a diferencia de las otras variedades, no deben asociarse con una falta de higiene así que no hay que avergonzarse si se produce un caso en la familia.
Los piojos adultos rehúyen la luz, por eso se alojan principalmente en la nuca y detrás de las orejas. Así que si tienes dudas de si tu hijo tiene o no piojos, estos son los primeros dos lugares en los que tendrás que buscar para salir de dudas.
La hembra adulta fija sus huevos, llamados liendres, fuertemente a la raíz del pelo con una sustancia que actúa como pegamento y hace que sus huevos sólo se puedan despegar con mucha dificultad. Para un proceso más sencillo puedes utilizar un peine de púas, llamado liendrera.
La eclosión de los huevos se produce al cabo de 7 a 10 días después de la puesta. La presencia de estos huevos delata que el individuo ha estado infestado. La infestación activa se observa cuando se detectan individuos adultos activos. Si hay liendres aparecerán en el peine unas manchitas blancas, parecidas a la caspa, pero más pegajosas. No confundirlas.
La proliferación es más frecuente en otoño, o en primavera, pues no les gusta ni el frío intenso ni el calor intenso. Hay que tener en cuenta que los animales de compañía no transmiten los piojos.
Los piojos y la escuela
En los colegios es habitual encontrar casos de piojos, especialmente entre los niños más pequeños. De hecho, los piojos son una plaga creciente entre la población escolar europea de los últimos años.
La época de auge de los piojos escolares suele empezar en octubre y en primavera, después de Semana Santa, y se mantiene durante el invierno. Algunos expertos dicen que los niños los traen de sus vacaciones escolares. Hoy en día se considera que se puede llevar al niño al colegio mientras dure la infestación, procurando llevar el cabello lo más corto posible.
Cuando se descubre que algún niño tiene piojos, el primer paso es informar a los padres. El colegio debería enviar una nota a todos los padres, independientemente de si sus hijos se han contagiado o no, ya que tan importante es eliminar el parásito de un niño infectado como vigilar que no se extienda por las cabezas de otros alumnos. Hay profesores que prefieren conversar con los padres de los niños afectados para comentar con ellos el protocolo a seguir.
Y tú, ¿ya utilizas alguno de estos remedios? ¡Cuéntanos tu solución para acabar con estos molestos bichitos! Y si necesitas más información sobre productos, no lo dudes y revisa esta sección en la que tenemos un sinfín de soluciones esperándote.
Juan María Serra Mandri, Farmacéutico
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